El opio de un pueblo en crisis

El fútbol y Belén Esteban; En la Edad Media, la religión era el "opio del pueblo", aquello a lo que la población se aferraba para evadirse de sus problemas cotidianos. Actualmente, en estos tiempos de crisis, y con un religión cristiana en cierta decadencia (dicho sea de paso), mucho me tempo que el citado "opio del pueblo" está representado a través de estos dos elementos.

El fútbol, la liga española, con una masiva afición, es ajeno a la crisis. Da igual que no podamos pagar la hipoteca, tenemos 15€ para ver Gol Televisión, aunque mañana no comamos. Ni la ropa, ni la electrónica. En tiempos de crisis, el fútbol es un deporte que engancha y entretiene muchas horas al día.Caja Madrid cede miles de millones al Real Madrid para fichar a Cristiano Ronaldo, y mañana, Caja Madrid me deniega una hipoteca, un préstamo, por mínimo que séa. ¿No notáis que hay algo raro que no concuerda en todo esto?

Ciertamente, hay sectores a los que no llega el fútbol y por lo tanto, no interesa. Es el caso de Belén Esteban. Desde que comenzara hace cerca de un año en el programa Sálvame, su vida ha sido seguida con mucha vehemencia, tal es así, que ha sido clasificada como un "fenómeno social", un "animal televisivo", palabra que pronuncia, tiene repercusiones en otras cadenas, en otros periódicos. Es increíble el seguimiento que puede llegar a tener un personajillo del cuore. Podemos decir que la Esteban es para muchos, una anestesia contra esta dolorosa crisis, contra las penurias económicas. Qué mejor plan, que sentarse dos horas, dejarse llevar por esta tipa y sus "encantos". Luego, de vuelta al mundo real, los mismos problemas de siempre.

Una pena que las cadenas de televisión, ya sea Gol TV o Telecinco, hagan negocio con todo esto. Y por otro lado, gente que en vez de sacarse las castañas del fuego, prefiere los gritos de la Esteban y las lesiones de Cristiano como forma de entretenimiento.
Ya he visto suficiente, lo justo como para poder opinar y rellenar esta entrada, y no quiero formar parte de este circo de manipulaciones. O dicho de otro modo, no quiero ser manipulado.

PD. El otro día, tomando un café con una amiga, me dijo: "Pero ¿tú cómo ves estos programas, cómo eres capaz de ver Telecinco?,", a lo que respondí "Yo veo un programa para poder criticarlo. Si no veo, no puedo decir nada de él, para bien o para mal. Eso sí, uno, dos, o a lo sumo tres programas me valen para tener una opinión y no seguir viendo más de lo necesario".
Su respuesta: "Pues yo no los veo, y los critico". Tú misma... es dificil criticar sin saber, en definitiva hablar sin conocer, pero es decisión tuya...